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domingo, 10 de abril de 2016

¿QUÉ HACE LA UE PARA LA MEJORA Y CONSERVACIÓN DE LOS GENES DE PRODUCTOS DE INTERÉS ALIMENTARIO?

Los recursos genéticos juegan un papel importante en la creación de una cadena de valor agroalimentaria diversa y económicamente viable. La diversidad genética en los alimentos y la agricultura es vital para garantizar la producción de alimentos de alta calidad y para una producción con razas animales, bosques y plantas más diversas y mejor adaptada para hacer frente a los cambios del entorno, los efectos del cambio climático (como la sequía), y nuevas plagas y enfermedades.

Con este fin, a raíz de una iniciativa del Parlamento Europeo, la Comisión Europea puso en marcha un proyecto de estudio en 2014 que ha mapeado iniciativas europeas para la conservación y el uso sostenible de los recursos genéticos. El proyecto da información y muestra la importancia de la diversidad genética para el futuro de la alimentación y la agricultura europea. También mejora la cooperación entre agricultores, investigadores, criadores y consumidores a lo largo de la cadena de valor, haciendo toda la información relacionada disponible gratuitamente.

Para revertir la pérdida de la diversidad genética agrícola en la Unión Europea (UE) es necesaria la colaboración de todos los involucrados e interesados en los recursos genéticos para trabajar juntos en pro de conservar y promover variedades y razas genéticas existentes y nuevos. Este ha sido el objetivo del Grupo de Enfoque EIP-AGRI sobre "Recursos genéticos - los modelos de cooperación" que reunió a 20 expertos con diferentes antecedentes y experiencias (científicos, agricultores y asesores) en 2014-2015, para proponer estrategias para motivar a los agentes públicos y privados a participar en los modelos de cooperación para el recursos genéticos.

Este grupo trabaja para que la base genética de las razas y cultivos en nuestros paisajes agrícolas se pueda ampliar mediante el uso y la promoción de semillas y razas que sean más resistentes, y por  la (re)introducción de razas tradicionales y cultivos en la cadena de valor, haciéndolos comercialmente viables. Al explorar la cooperación existente y nueva entre los agricultores, los ganaderos, la comunidad de investigadores, conservacionistas de semillas (por ejemplo, bancos de genes) y las industrias agroalimentarias, así como los minoristas y los consumidores, el conocimiento puede ser compartido de manera más eficiente.

Desde este enlace podéis descargaros el folleto que proporciona ejemplos de éxito en la cooperación en materia de recursos genéticos de origen animal y vegetal con la esperanza de inspirar a la gente a probar nuevos métodos de cooperar y encontrar ideas para grupos operativos potenciales u otros proyectos innovadores en el campo de los recursos genéticos.

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