IDIOMA

martes, 1 de noviembre de 2016

PASA HALLOWEEN... ¿Y AHORA QUÉ HACEMOS CON LAS CALABAZAS?

La calabaza es una hortaliza de otoño muy presente en las cocinas, sobre todo después de Halloween donde es tradicionalmente utilizada para ambientar casas, jardines, restaurantes y comercios en esta época del año. El término pumpkin, calabaza en inglés, proviene de la palabra griega pepon que describe a un melón grande.

Pero además de su fama con fines decorativos, se trata de un alimento muy nutritivo y con grandes beneficios para nuestra salud.

Posee un alto contenido en fibra, especialmente en fibra soluble pectina que ayuda a la digestión lenta, proporcionando energía a largo plazo y niveles estables de glucosa en sangre después de una comida. Además es muy diurética, por lo que es especialmente útil para dietas de adelgazamiento. Sus propiedades depurativas además nos ayudan a limpiar nuestro cuerpo y a mejorar los problemas intestinales.

Contiene gran cantidad de mucílagos con acción suavizante y protectora de la mucosa del estómago, por lo que está indicada en casos de acidez de estómago, digestiones difíciles o gastritis, ya que calma la irritación y el dolor de estómago. Tiene un alto contenido en vitaminas A, B y C, así como en minerales (cobalto, boro, zinc, calcio, magnesio, manganeso, hierro y potasio). 

Sus semillas gracias al magnesio que contiene, previene las migrañas.


Su zinc le permite añadir al cuerpo más de lo que pensamos, desde el crecimiento celular, el apoyo hormonal (testosterona), mantener el sueño y el buen humor.

Su hierro hace que se evite las anemias, siendo un gran aliado para las mujeres sobre todo; además reducen los síntomas de la menopausia.

Los betacarotenos que contiene (los elementos que le proporcionan su característico color naranja) han demostrado ser muy importantes en la prevención del cáncer de pulmón, colon, próstata, estómago y útero. El beta-caroteno al ser consumido se transforma en vitamina A, que es muy importante para la salud ocular y para fortalecer el sistema inmunológico. 

En un mega-estudio hecho en Estados Unidos, publicado en las principales revistas científicas, con participación de más de 30.000 participantes se encontró una asociación significativa entre la ingesta del beta-caroteno de la calabaza y una reducción en la incidencia de diabetes tipo 2. 

Es alimento indicado para personas con diabetes pues aunque contiene un buen porcentaje de hidratos de carbono, un estudio realizado con ratas, publicado en 2009 en "Bioscience, Biotechnology, and Biochemistry" y realizada en Japón demostró que también contiene grandes cantidades de trigonelina y ácido nicotínico, los cuales mejoran la absorción de la glucosa hacia las células musculares, integrándose esta vía con la insulina, hormona anabólica por excelencia, retrasando la progresión de la enfermedad.

La calabaza también contiene ciertos tipos de polifenoles, antioxidantes que pueden ayudar a reducir la azúcar en la sangre, según un estudio de laboratorio, publicado en el "Journal of Medicinal Food" en junio de 2007. Otro estudio con ratas, publicado en "Plant Foods for Human Nutrition" en marzo de 2005, encontraron que ciertas glicoproteínas de las calabazas disminuyeron los niveles de azúcar en la sangre y mejoraron la tolerancia a la glucosa.

Su alto contenido en antioxidantes también nos ayuda a aumentar nuestras defensas y existen además referencias que reduce los niveles de colesterol y regula el sistema cardiovascular, manteniéndolo sano.

Tiene propiedades anti-inflamatorias, especialmente en las articulaciones, evitando la artritis o los problemas neuromusculares.

Mantiene la piel brillante y sana, así como los cabellos y uñas.


¿CÓMO COCINAR LA CALABAZA?


Una vez cortada a la mitad, se retiran las semillas con una cuchara, se pela y se parte en trozos pequeños. También puede ir sacándose la pulpa con un sacabocados y nos ahorramos pelarla, lo cual suele ser complicado y además así podemos guardar la corteza como cuenco para presentar un puré, crema, magdalenas o galletas. Son muchísimos los platos que pueden realizarse con este rico fruto. La calabaza también suele acompañar a los garbanzos en algunos guisos, y su sabor dulce está siendo usada en un giro interesante al aperitivo más internacional del mundo árabe, el hummus.

www.nature-id.com
Se recomiendan métodos de cocinado que mantengan todas sus propiedades, como una cocción lenta a vacío con baja temperatura. También se puede pincelar su pulpa con aceite para pasarla a una bandeja boca abajo y hornearla. Los tiempos de cocción duran entre 25-35 minutos, horneándola a Tª inferior a 200 ºC. Si no hay tiempo puede usarse también el microondas, partiéndola previamente a trocitos los cuales deberían estar cubiertos con una toalla de papel húmeda, calentándose durante 10-12 minutos hasta que esté tierna pudiendo ser una buena forma de disfrutar de este fruto de otoño.




No hay comentarios:

Publicar un comentario

Deja tu comentario: