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Las bayas, frutos rojos, berries o frutas silvestres (por ejemplo, arándano, mora y fresa) son ya conocidas como "súper frutas" por su enorme potencial en los mercados de alimentos nutracéuticos y funcionales. Los pigmentos que confieren color a las bayas, son compuestos fitoquímicos muy relacionados con la capacidad antioxidante total de éstas frutas y sus propiedades organolépticas. Los antioxidantes neutralizan radicales libres, origen de muchas enfermedades y una de las causa del envejecimiento celular.
Son además buena fuente de vitaminas, fibra, un amplio rango de ácidos fenólicos (incluyendo ácido gálico, acido protocatecuico, ácido p-hydroxibenzoico, ácido vanilico, acido caffeic, acido p-coumarico, acido ferulico, acido ellagico y acido cinamico) y varios tipos de flavonoides (flavona: luteolina; flavonoles: rutina, miricetina, quercetrina, y quercetina; flavanoles: galocatequina, epigalocatequina, catequina, y galato catequina; antocianidinas: malvidin-3-galactosido, malvidin-3-glucosido, and cianidina). Existe por tanto un elevado potencial para las berries en el mercado de los ingredientes para alimentos y bebidas funcionales o nutraceuticos.
Estos compuestos se han relacionado con beneficios para el aparato digestivo, aparato locomotor, sistema inmune, nutrición y control de peso, sistema nervioso, aparato urinario, etc.
Fresas
Las fresas contienen un 85% de agua y aportan pocas calorías. 100 gramos contienen apenas 34.5 calorías. Son fuente de muchas vitaminas y minerales tales como vitamina C, E, ácido fólico, calcio, yodo, fósforo, magnesio, hierro y potasio.
Poseen propiedades revitalizantes y antioxidantes. Aportan poca cantidad de azúcar y son altas en fibra, por lo que constituyen un buen ingrediente para regímenes adelgazantes o para dietas de personas diabéticas. Además de sus propiedades nutritivas, las fresas se utilizan con fines medicinales y depurativos, se les atribuyen propiedades diuréticas, antirreumáticas, astringentes, antiinflamatorias, antianémicas y anticancerígenas, entre otras.
Las fresas constituyen la base de dietas depurativas, pues purifican el sistema digestivo, eliminando las toxinas del organismo. También la cosmética ha sabido aprovechar sus beneficios contra las arrugas, problemas de la piel o para calmar los efectos de la insolación. Sus hojas y pulpa se utilizan en mascarillas naturales para la piel grasa.
Comer fresas puede ser beneficioso para disminuir los niveles de colesterol, gracias a su alto contenido en ácido ascórbico. Además las fresas tienen propiedades reconstituyentes, lo que las hace ideales para estimular el crecimiento y la recuperación de enfermedades.
Por otra parte, con las hojas de las fresas pueden prepararse infusiones, que se emplean por sus efectos diuréticos, antiinflamatorios y antirreumáticos. Por todas estas propiedades, incluir fresas en tu dieta, constituye una excelente forma de contribuir a tu salud.
Las fresas han demostrado tener una notable actividad captadora de radicales generados químicamente, lo que las hace efectiva en la inhibición de la oxidación del LDL en humanos. La actividad antioxidante de las fresas podría contribuir a la prevención del cáncer, de enfermedades cardiovasculares y otras enfermedades crónicas .
Arándanos
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Los arándanos son plantas de flores del género Vaccinium con bayas de color púrpura óscuro, cuyas antocianinas son consideradas los antioxidantes más potentes de la naturaleza y poseen propiedades demostradas que van mucho más allá de la supresión de los radicales libres. Los arándanos contienen altos niveles de proantocianidinas y antocianidinas, compuestos que son en gran medida responsables de su alto poder antioxidante.
Moras
Las moras son frutas producidas por varias especies del género Rubus (por ejemplo, R. fruticosus, R. ursinus, y R. argutus). Las moras son notables por sus beneficios para la salud mediados por altos contenidos nutricionales de fibra dietética, vitamina C, vitamina K, ácido fólico, y el mineral esencial manganeso. Las moras se posicionan entre los primeros puestos en el ranking de las frutas con mayor capacidad antioxidante, en gran medida debido al alto contenido de compuestos fenólicos, como ácido elágico, taninos, elagitaninos, quercetina, ácido gálico, antocianinas y cianidinas.
A continuación enumeramos algunos de los compuestos bioactivos que contienen las berries y sus propiedades para tu salud:
- Fibra dietética: Sólo se encuentra en los alimentos vegetales. La fibra ayuda a mantener la salud del tracto gastrointestinal, reduce el colesterol en la sangre, evita la aparición de enfermedades cardiovasculares y puede ayudar prevenir ciertos tipos de cáncer. Tiene además efecto prebiótico.
- Ácido Ascórbico (Vitamina C): Una de las vitaminas con mayor capacidad antioxidante.
- Antocianinas/proantocianidinas: pigmentos que les dan color a las berries. Son poderosos antioxidantes.
- Catequinas: son flavonoles que participan en la actividad antioxidante.
- Ácido Elagico: Compuesto fenólico reconocido por sus propiedades anti-cancerígenas, anti-virales and anti-bacterianas.
- Ácido Galico: Potente antioxidante que también se encuentra en el té negro y vino tinto. Ha demostrado inhibir la proliferación celular y provocar la muerte celular en células tumorales.
- Quercetina: Un flavonol que actúa como anti-cancerígeno y promueve la salud cardiovascular.
- Rutina: Un bioflavonoide que promueve la salud vascular y que posee actividad antiinflamatoria y antialérgica.
- Acido Salicilico: El ácido salicilico que se encuentra en las berries tiene propiedades muy similares a la aspirina (ácido acetil salicílico). Por lo tanto, el consumo de berries en cantidades adecuadas puede ayudar a mantener una salud cardiovascular de una forma similar.
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Actividad antioxidante
Las bayas poseen niveles de antioxidantes que se encuentran entre los más altos en comparación con otras frutas. La col rizada y las espinacas son las únicas verduras con valores antioxidantes similares a los de las berries.
Sistema Urinario
Las berries promueven la salud del tracto urinario y reducen el riesgo de infección.
Parece ser que el mecanismo a través del cual son capaces de mantener el tracto urinario en buena salud es previniendo la adhesión de las bacterias a las células que recubren las paredes de las vías urinarias. El crecimiento de líneas celulares tumorales de cáncer de próstata ha sido ralentizado con éxito con proantocianidinas obtenidas de arándanos silvestres y cultivados.
Sistema digestivo
Algunas berries, entre las que se encuentran los arándanos, han demostrado ser fuentes ricas en prebióticos. Los prebióticos sirven como alimento para los probióticos como los lactobacilos y las bifidobacterias, por lo que contribuyen a la proliferación de bacterias beneficiosas en el intestino y el colon. Ayudan a reducir la inflamación intestinal.
Sistema inmune
Promueven la estimulación del sistema inmune.
Compuestos bioactivos de las berries, junto a la vitamin D, son capaces de activar el sistema inmunitario. El pterostilbeno es un estilbenoide químicamente relacionado con el resveratrol que se encuentra en los arándanos y uvas. Pertenece al grupo de las fitoalexinas, sustancias producidas por las plantas para combatir las infecciones.
Sistema nervioso
Ciertas berries han demostrado en experimentos de laboratorio ser capaces de ralentizar el detorioro cognitivo asociado con el envejecimiento. Nuevas evidencias apuntan a que los arándanos pueden también mejorar la memoria y que el consumo de arándanos puede aliviar el deterioro cognitivo que ocurren en enfermedades como el Alzheimer y otras alteraciones del organismo causadas por el envejecimiento.
Sistema circulatorio
Los arándanos también ayudan a mantener un flujo sanguíneo saludable a través de varios mecanismos entre los que se incluye la oxidación de las lipoproteínas de baja densidad (LDL), agregación plaquetaria normal y el mantenimiento de la función endotelial.
Sistema endocrino
Estudios han demostrado que el consumo habitual de berries mejora sustancialmente los niveles de glucosa en sangre, aumentando la sensibilidad a la insulina en pacientes obesos, diabéticos, y resistentes a la insulina.
Aparato locomotor
Varios estudios científicos publicados han hallado una relación positiva entre la ingesta de polifenoles, en particular aportados por bayas, con una mayor masa ósea. Lo que implica que las bayas podrían convertirse en alternativas naturales de bajo costo para reducir el riesgo de pérdida ósea relacionada con la edad.
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